Hola amigos de TC10 voy a contaros mi historia: supongo que todos tenemos una… espero que la mía os sirva por si alguien se siente identificado.
Mi sobrepeso empezó en la adolescencia, en la etapa de crecimiento, siempre fui una persona “de buen comer”, esto hizo que junto con otro de los factores más comunes actualmente en todas las familias, “la falta de tiempo” para realizar comidas y el desconocimiento de la nutrición desembocara en un problema que sufrí más tarde…
El primer rechazo que sufrí fue cuando intenté ingresar en las fuerzas armadas, ya que por mi sobrepeso, que entonces era mucho creo recordar (120, 130 kg.) me negaron la posibilidad de realizar las pruebas de ingreso.
Hasta la fecha quizá no era muy consciente del daño físico que me estaban causando mis malos hábitos alimenticios, no desayunar, comer a deshoras, comer grandes cantidades y rápidamente para poder saciar el hambre, picotear incluso a escondidas de mi familia algunos alimentos etc…
Tras tomar consciencia del daño causado y con la ayuda de mi madre, emprendimos un camino de cambio saliendo a andar todas las tardes varias horas y cuidando poco a poco la alimentación. Entonces unos meses más tarde me volví a presentar a las pruebas de las fuerzas armadas y pude conseguir una plaza, una vez allí en un régimen estricto sería todo más fácil, horarios, disciplina y deporte, así que en gran parte le debo mucho a esta vocación.
Me trasladé a Madrid por motivos de trabajo y cuando el problema parecía erradicado, volví a los malos hábitos sin darme cuenta, amistades no saludables, salidas de marcha, comidas rápidas, menos ejercicio, etc.
Esto me llevó a caer de vuelta en muchos complejos olvidados, no encontrar ropa de tu talla, vergüenza al desnudarte delante de la gente, bajar mi rendimiento en el deporte militar, no querer ir a la playa etc. (Yo siempre gasto una broma cuando explico esto, que me di cuenta que estaba gordo porque escuchaba a los niños “gana quien toque antes la boya” y venían a tocarme a mí)
De nuevo todo esto me llevó a plantearme un cambio y está vez era distinto, tenía claro que para estar bien y saludable tenía que restringir muchísimas cosas y tener otra serie de hábitos a los que había seguido hasta ahora.
Mi cambio comenzó realizando el camino de Santiago desde Madrid a Santiago andando (no porque fuera religioso, sino porque había leído experiencias de gente que ese camino les abrió los ojos y les hizo pensar en muchas cosas). Pues bien, realicé el camino con una gran persona y deportista Ezequiel Valiño, (amigo y jefe mío) el cual me ayudó a cambiar muchísimo la mentalidad y a poder enfocar la vida de otra forma.
Después de esta experiencia ¡¡que recomiendo por supuesto!!, emprendí mi andadura esta vez contratando los servicios de un profesional, un entrenador personal el cual se encargaba de llevar mi alimentación (una anécdota es cuando me acerqué a él para preguntar por sus servicios, le dije que me quería poner fuerte como él, a lo que él me contestó “jajajaja ¡en tu vida!” (es normal un cuerpo trabajando durante años y llega un chaval de 150 kg aproximadamente a decirte eso, es gracioso, hasta yo lo entiendo) Este profesional con el paso del tiempo, sabiduría y amistad, consiguió que lograra un cuerpo del cual no sentirme avergonzado, él también despertó en mí el sentimiento de poder competir en culturismo, un premio al sacrificio máximo de trabajar y ver mejorar tu físico con el tiempo. Por motivos personales decidí abandonar la preparación de su mano e intentar llegar a este nuevo objetivo por otro camino.
Salí a competir en Classic bodybuilding con un físico no adecuado para competir pero bueno, pensaba que ya estaba más cerca y que era una experiencia más. Después del golpe de la post-competición, tanto sacrificio, piensas que es tiempo perdido, amigos, vida social que dejas a un lado etc. ya que los que nos dedicamos a este deporte tenemos que sacrificar en determinadas épocas algunas cosas por la falta de energía y esto quizá dificulta más esa vida social más activa, pero como digo siempre son solo algunas temporadas, ¡el resto se puede adaptar perfectamente!
Pues bien, después de este palo y cargarme por tercera vez mi físico y perder la motivación, decidí ponerme en las manos de un amigo y preparador con otra perspectiva de este deporte y de la dieta hasta la fecha, pues mis dietas habían sido duras, simples y básicas, él es Jesús Gallego mi actual preparador y unos de mis pilares básicos que me ha enseñado a ver todo de otra forma saludable y mucho más fácil, disfrutando siempre del camino.
Partíamos de un punto muy malo porque el físico no respondía, y la cabeza no estaba para tirar de nada, con nuestro primer año de trabajo juntos conseguimos mejorar muchísimo el físico de cara a las competiciones de culturismo ¡rozando varias finales! Actualmente continuamos trabajando en la nueva versión de mi físico de cara a la temporada 2017 que espero que me dé grandes resultados, y si no siempre queda todo este increíble camino recorrido con experiencias más que positivas y de aprendizaje sobre mi mismo en lo personal.
Mi forma de ver la vida es distinta porque aprendí a alejarme de muchas cosas, entre ellas de gente tóxica, envidiosa y negativa. También ahora estoy muy bien rodeado de gente que se cuida y me comprende como es mi pareja, que ella viene justamente del otro extremo. Tener una persona igual de exigente, igual de disciplinada con su alimentación y su entreno, la verdad hace que tu día a día sea más fácil, mis amigos de verdad, esos que llamo gord@s y siempre están a mi lado y por supuesto ¡¡con muy buenos hábitos!!
En fin, está es mi historia, no me han regalado nada nunca, lo que tengo me lo he ganado yo solo ¡con el sudor de mi frente! Como consejo, mi cambio parece de anuncio u operación ¡pero no es así! Sólo hace falta ser realista y saber que para no verte así tienes que sacrificar muchas cosas y que va a ser durante un periodo largo que nadie sabe lo que va a durar, pero que te va a merecer la pena, y te lo dice alguien que lo ha hecho varias veces.
Así que siempre estaré animando a todo el mundo a conseguir lo que quiere porque si lo deseas con todas tus fuerzas se puede lograr, Fuerza y Honor.