Hola, mi nombre es Mónica, tengo 48 años, y quisiera contaros mi relación con el deporte a lo largo de mi vida.
Desde los 10 años, hasta los 13, petenecí al grupo de gimnasia rítmica de mi colegio. Reconozco que me gustaba mucho y no se me daba mal, llegué a participar en un campeonato regional en la modalidad de pelota. Cuando mi colegio cambió de ubicación, lo dejé. En aquellos tiempos los padres no se comprometían como ahora en llevar y traer a sus hijos a las actividades extraescolares, no nos contemplaban y era otra forma de vida. Después llegó la adolescencia con sus salidas, y quedó olvidado por un tiempo.
Hasta los 27 años, mi única relación con el deporte consistía en irme a esquiar fuera de Asturias durante una semana y algún fin de semana el resto de la temporada en mi región. Llegaron los hijos, y de nuevo parón, hasta que pude volver al esquí con mi hijo mayor y más tarde con los dos cuando tuvieron edad suficiente.
Con el tiempo empecé en un gimnasio cerca de mi casa, me gustaba, lo pasaba bien, pero sin más. Probé gimnasia de mantenimiento, aerobic, spinning, haciendo parones ya que lo único que me motivaba era el pensamiento de que “había que hacer ejercicio”.
Más o menos a los 42 comencé con el TRX , me gustaba de verdad, no me perdía ni una clase y con la continuidad empecé a ver algún cambio en mi cuerpo. También dedicaba un día a la semana a las pesas y otro a los abdominales, total, cuatro días a la semana que le dedicaba al ejercicio.
Comencé a leer blogs y artículos sobre entrenamientos y nutrición y entonces conocí el Crossfit, el mundo de los box, su lenguaje, e intentaba emular algunos ejercicios que se realizan como los saltos al cajón, los lunges, el paseo del granjero, las dominadas, las planchas, etc.
Un día me enteré que iban a abrir un box de cerca de mi trabajo , no lo pensé y me apunté a una clase de prueba. Desde esa clase no dejé de ir ni un solo día, ni siquiera falté por el verano. Me tiene completamente enganchada, para mi cada día que voy es una nueva superación, siempre tengo en mente algún ejercicio que quiero mejorar o alguno que quiero comenzar a hacer.
Me encanta la comunidad creada, cada logro es la alegría de muchos, los nuevos son bienvenidos, procurando crear complicidad con ellos.
Hace un año más o menos me empezó a preocupar el tema de la alimentación, no solo por lo saludable , también por quitarme unos quilos que con la edad se van acumulando. Comencé a estudiar Dietética y Nutrición con idea de especializarme en Nutrición Deportiva. Mi principal cometido es el de cuidar mi alimentación y la de los mios.
Un cambio fundamental en mi vida fue abandonar el tabaco,Yoga Asthanga, es ayudar a las mujeres de cuarenta años a que consigan vivir plenamente, aceptando su cuerpo, alimentándose lo más natural posible y llevándo con ilusión y felicidad su madurez.
Fotografías: Arturo Fabián